Eslovaquia es un país con una rica historia en la que hubo de todo: tragedia, grandeza y reinos y principados que se hundieron en el olvido.
Por su ubicación, prácticamente en el mismo centro de la vieja Europa, Eslovaquia participó directa o indirectamente en casi todos los acontecimientos que se sucedieron en abundancia en el sufrido continente. Y así fue en la Segunda Guerra Mundial.

Tabla de contenidos
Introducción al Memorial de Slavín
Ocupada en 1939, Bratislava fue liberada por el ejército soviético en abril de 1945 de las garras de los alemanes y tropas afines a Josef Tiso. Y en memoria de aquellos eventos se erigió un impresionante monumento en una montaña con el hermoso y revelador nombre de Slavín, dedicado a los soldados que lucharon y se dejaron la vida en el campo de batalla defendiendo su ciudad.
Este complejo conmemorativo en la montaña de Slavín, sobre Bratislava, está considerado uno de los monumentos militares más impresionantes dedicados a los caídos en la sangrienta Segunda Guerra Mundial.
El lugar del memorial no fue elegido por casualidad, aunque parece que fue imposible encontrar uno mejor. El complejo conmemorativo de Slavín se levantó alrededor del cementerio militar en el que fueron enterrados los oficiales y soldados que liberaron la capital eslovaca.
Los autores del proyecto fueron el arquitecto eslovaco Ján Svetlík y el escultor Alexander Trizuljak. El monumento se inauguró el 4 de abril de 1960, coincidiendo con el 15º aniversario de la liberación de Bratislava.

Lo primero que llama la atención del memorial es un obelisco con la figura de un soldado sosteniendo un estandarte. La altura del obelisco es de 39,5 metros y la figura del soldado agrega 11 metros adicionales.

Todo el memorial está dividido en tres partes principales:
1.- La primera parte es el juramento al estandarte de batalla (una escalera de dos tramos con bajorrelieves).
2.- La segunda parte, la conocida como «Gratitud a los Héroes Caídos», un cementerio en el que descansan 6845 personas caídas durante la liberación de Bratislava.
3.- Y la tercera es una sala de luto, a donde conduce una puerta con bajorrelieves que representan episodios de la liberación del país. Sobre esta última parte se alza el obelisco y la estatua del soldado.

No hace mucho tiempo, también se instaló una cruz ortodoxa en la montaña. Se dice que es para dar paz aquellos que descansan en Slavín y que dieron sus vidas por su ciudad.
El territorio del memorial de Slavin está protegido por el Estado. El presidente del país participa personalmente en ceremonias solemnes en fechas memorables cada año.
Recorriendo el Memorial de Slavín
Información práctica
Dirección: Colina de Slavín, Bratislava. La calle más cercana es Pažického.
Cómo llegar: caminando desde el casco antiguo de la ciudad en media hora (unos 2 kilómetros). Paradas de autobús más cercanas: Slavín, Havlíčkova o Stará vinárska.